Por Hernán Vanoli
Urman bajando del auto
y tomándose una copa de vino
abandonada
en la ventana
de la planta baja de un edificio
sobre Camargo
es la maqueta de un potlatch peronista
la esquina de Luis Viale
y Avenida San Martín
donde preparan los mejores sándwichs de milanesa
a 4,50
con huevo a la plancha
que se pone marrón
y pibes de ojos rojos
que fuman con la capucha puesta
mientras una nena de tres años
hace caer al piso
una zanella con una caja de plástico para el reparto
atada con un hilo negro
es un verdadero oasis peronista
*